Thursday, January 15, 2009

45-Al-Jaathiya

En el Nombre de Dios, el Más Misericordioso, el Dispensador de Gracia



(1) Ha. Mim.
(2) La revelación de esta escritura divina procede de Dios, el Todopoderoso, el Sabio.
(3) Ciertamente, en los cielos y en la tierra hay en verdad mensajes para todos los que [están dispuestos a] creer.
(4) Y en vuestra naturaleza, y en [la de] todos los animales que Él disemina [por la tierra] hay mensajes para gente dotada de certeza interior.
(5) Y en la sucesión de la noche y el día, y en los medios de subsistencia que Dios hace descender del cielo, dando así vida a la tierra cuando estaba muerta, y en la variación de los vientos: [en todo esto] hay mensajes para gente que hace uso de la razón.
(6) Estos mensajes de Dios te transmitimos, exponiendo la verdad. ¿En qué otro anuncio van a creer, después de [haber rechazado] los mensajes de Dios?
(7) ¡Ay de todo aquel autoengañado, pecador
(8) que oye los mensajes de Dios que le son transmitidos, y sin embargo, persiste en su desdeñosa altivez, como si no los hubiera oído! ¡Anúnciale, pues, un castigo doloroso –
(9) porque cuando llega a su conocimiento alguno de Nuestros mensajes, los toma a burla! A todos esos les aguarda un castigo humillante.
(10) Estará acechándoles el infierno; y todo lo que hayan adquirido [en este mundo] no les servirá de nada, ni tampoco ninguna de esas cosas que han dado en considerar protectores suyos en vez de Dios: pues les aguarda un castigo terrible.
(11) [Prestar atención a los signos y mensajes de Dios:] esa es [la esencia de] la guía; en cambio, a los que se empeñan en negar la verdad de los mensajes de su Sustentador les aguarda un castigo doloroso por [su] vileza.
(12) Dios es quien ha sometido el mar [a Sus leyes, para que os sea útil] a vosotros --para que los barcos naveguen por él a instancia Suya, y para que busquéis [lo que preciséis] de Su favor y ello os mueva a ser agradecidos.
(13) Y ha puesto a vuestro servicio, [como un regalo] procedente de Él, todo cuanto hay en los cielos y en la tierra: ¡ciertamente, en esto hay en verdad mensajes para gente que reflexiona!
(14) Di a los que han llegado a creer que deben perdonar a quienes no creen en la llegada de los Días de Dios, [pues sólo] a Él incumbe retribuir a la gente según se merecen.
(15) Quien obra con rectitud, lo hace en beneficio propio; y quien obra mal, lo hace en contra de sí mismo; y al final todos seréis devueltos a vuestro Sustentador.
(16) Y, en verdad, dimos [ya] a los hijos de Israel la revelación, la sabiduría y la Profecía; y les proveímos de las cosas buenas de la vida, y les favorecimos sobre todos los demás pueblos [de su tiempo].
(17) Y les dimos indicaciones claras del propósito [de la fe]; y sólo después de habérseles dado todo este conocimiento empezaron, por envidias entre ellos, a adoptar posturas divergentes: [pero,] realmente, tu Sustentador juzgará entre ellos en el Día de la Resurrección sobre aquello en lo que solían discrepar.
(18) Y, finalmente, [Oh Muhámmad,] te hemos puesto en un camino por el cual se cumpla el propósito [de la fe]: sigue, pues, este [camino] y no sigas los caprichos de los que no saben [de la verdad].
(19) Ciertamente, de nada te servirían si desafiaras la voluntad de Dios --pues, realmente, esos malhechores son amigos y protectores unos de otros, mientras que Dios es el Protector de los que son conscientes de Él.
(20) Esta [revelación,] es una vía de discernimiento para los hombres, y una guía y misericordia para gente dotada de certeza interior.
(21) ¿O es que creen quienes cometen malas acciones que habremos de tratarles igual, en su vida y a su muerte, que a quienes han llegado a creer y han hecho buenas obras? ¡Qué mal juzgan!
(22) –pues, Dios ha creado los cielos y la tierra conforme a una verdad [intrínseca], y [ha dispuesto por tanto] que cada ser humano sea retribuido según sus merecimientos y que nadie sea tratado injustamente.
(23) ¿Has considerado alguna vez a ese [tipo de hombre] que hace de sus deseos su dios, y a quien Dios [entonces] ha dejado que se extravíe, sabedor [de que su mente está cerrada a la guía], y ha sellado su oído y su corazón, y ha puesto sobre sus ojos un velo? ¿Quién podría guiarle [entonces,] después de [haber sido abandonado por] Dios? ¿No vais, pues, a recapacitar?
(24) Y no obstante dicen: “No hay nada después de esta vida nuestra. Morimos como hemos nacido, y sólo el tiempo nos destruye.” Pero de esto no poseen el menor conocimiento: no hacen sino conjeturar.
(25) Y [así,] cuando les son transmitidos Nuestros mensajes con toda su claridad, su único argumento es: “¡Traed [por testigos] a nuestros antepasados, si es verdad lo que decís!”
(26) Di: “Dios es quien os da la vida, y luego os hace morir; y al final os reunirá en el Día de la Resurrección, [de la llegada] del cual no hay duda –pero la mayoría de los seres humanos no lo entienden.”
(27) Pues, de Dios es el dominio sobre los cielos y la tierra; y el Día en que llegue la Última Hora –ese Día estarán perdidos todos los que [en vida] intentaron reducir a la nada [aquello que no podían entender].
(28) Y [ese Día] verás a toda la gente arrodillada [con humildad]: toda la gente será llamada a [hacer frente a] su registro: “¡Hoy seréis retribuidos por todo lo que hicisteis!
(29) ¡Este registro Nuestro habla de vosotros con toda veracidad: pues, realmente, hemos hecho anotar todo lo que hicisteis!”
(30) A los que llegaron a creer e hicieron buenas obras, su Sustentador les acogerá en Su misericordia: ¡ese, precisamente, será [su más] notorio triunfo!
(31) Pero a los que se empeñaron en negar la verdad [se les dirá:] “¿No os fueron transmitidos Mis mensajes? Y aun así, os mostrabais altivos, y acabasteis siendo una gente hundida en el pecado:
(32) pues cuando se decía: ‘Ciertamente, la promesa de Dios se cumple siempre, y no hay duda acerca de [la llegada de] la Última Hora’ –respondíais: ‘¡No sabemos qué pueda ser esa Última Hora: pensamos que no es más que una vana conjetura, y no estamos convencidos en absoluto!’”
(33) Y [ese Día,] la maldad de sus acciones se les hará evidente, y se verán arrollados por aquello de lo que solían burlarse.
(34) Y se dirá: “¡Nos desentenderemos hoy de vosotros tal como vosotros os desentendisteis de este vuestro Día [del Juicio]; y por ello vuestra morada es el fuego, y no tendréis a nadie que os auxilie:
(35) eso, porque os burlasteis de los mensajes de Dios y os dejasteis cautivar por la vida de este mundo!” Ese Día, pues, no serán sacados del fuego, ni se les permitirá ofrecer compensación.
(36) ¡Y así, la alabanza es debida por entero a Dios, Sustentador de los cielos y Sustentador de la tierra: el Sustentador de todos los mundos!
(37) ¡Suya es la majestad en los cielos y en la tierra; y sólo Él es todopoderoso, realmente sabio!