Thursday, January 15, 2009

36- Yaseen

En el Nombre de Dios, el Más Misericordioso, el Dispensador de Gracia



(1) ¡Oh Tú, ser humano!
(2) Considera este Qur’án, lleno de sabiduría:
(3) ciertamente, tú eres en verdad uno de los mensajeros de Dios,
(4) que sigue un camino recto
(5) [merced a] lo que se hace descender del Todopoderoso, el Dispensador de Gracia,
(6) [que te es revelado] para que adviertas a una gente cuyos antepasados no fueron advertidos, y que por eso viven indiferentes [al bien y el mal].
(7) De hecho, la palabra [dictada por Dios] acabará haciéndose realidad para la mayoría de ellos: pues no están dispuestos a creer.
(8) Ciertamente, les hemos puesto cadenas alrededor del cuello, que les llegan hasta el mentón, de forma que sus cabezas quedan erguidas;
(9) y hemos colocado una barrera delante de ellos y una barrera detrás de ellos, y les hemos envuelto en velos, de modo que no pueden ver:
(10) por eso, les da lo mismo que les adviertas o que no: no creerán.
(11) Tú sólo puedes advertir [realmente] a quien está dispuesto a tomar en serio la amonestación, y que teme al Más Misericordioso aun estando Él fuera del alcance de la percepción humana: ¡a ése, anúnciale la buena nueva del perdón [de Dios] y de una espléndida recompensa!
(12) En verdad, Nosotros haremos resucitar a los muertos; y tomaremos nota de todas las [obras] que enviaron por delante, y de los vestigios [de bien y de mal] que hayan dejado atrás: pues hemos detallado todo en un registro claro.
(13) Y plantéales una parábola –[la historia de cómo se comportaron] los habitantes de una ciudad cuando vinieron a ellos [Nuestros] mensajeros.
(14) He aquí, que les enviamos a dos [mensajeros] y a ambos les desmintieron; luego, [les] reforzamos con un tercero; y dijeron: “¡En verdad, hemos sido enviados a vosotros [por Dios]!”
(15) [Los otros] respondieron: “¡No sois sino hombres como nosotros; además, el Más Misericordioso nunca ha hecho descender nada [como revelación]. No hacéis más que mentir!”
(16) [Los enviados] dijeron: “Nuestro Sustentador sabe que hemos sido en verdad enviados a vosotros;
(17) pero no estamos obligados más que a transmitir con claridad el mensaje [que nos ha sido confiado].”
(18) [Los otros] dijeron: “¡Auguramos, en verdad, un mal de vuestra parte! ¡Si no desistís, ciertamente hemos de lapidaros, y sufriréis a manos nuestras un doloroso castigo!”
(19) [Los enviados] respondieron: “¡Vuestro destino, bueno o malo, está [enlazado] con vosotros! [¿Os parece mal] si se os dice que toméis [la verdad] en serio? ¡No, sois gente que se han dilapidado a sí mismos!”
(20) En eso, llegó un hombre corriendo desde el otro extremo de la ciudad, [y] exclamó: “¡Oh pueblo mío! ¡Seguid a estos mensajeros!
(21) ¡Seguid a quienes no os piden recompensa, y que están rectamente guiados!
(22) “[En cuanto a mí,] ¿por qué no habría de adorar a Aquel que me ha creado, y a quien seréis todos devueltos?
(23) ¿Voy acaso a adorar [otras] deidades en vez de a Él [cuando,] si el Más Misericordioso dispusiera para mí algún daño, su intercesión no me serviría de nada, ni podrían salvarme?
(24) ¡Entonces, sin duda estaría claramente extraviado!
(25) “¡En verdad, [Oh pueblo mío,] he llegado a creer en vuestro Sustentador: escuchadme, pues!”
(26) [Y le] fue dicho: “¡Entra[rás] en el paraíso!” –[ante lo cual] exclamó: “¡Ah, si mi pueblo supiera
(27) que mi Sustentador me ha perdonado [mis pasadas ofensas], y me ha puesto entre los que han sido honrados [por Él].
(28) Y después de eso, no hicimos descender contra su pueblo a ningún ejército del cielo, ni necesitamos hacerlo:
(29) no fue [necesario] más que un único estampido [de Nuestro castigo] –y ¡he ahí! que quedaron mudos e inmóviles como cenizas.
(30) ¡Ay, qué angustia para [la mayoría de] los seres humanos! ¡Jamás vino a ellos un enviado del que no se burlaran!
(31) ¿No ven cuántas generaciones anteriores a ellos hemos destruido, [y] que esos [que han perecido] no regresarán a ellos,
(32) y [que al final] a todos ellos se les hará comparecer, juntos, ante Nosotros?
(33) Y [sin embargo,] tienen un signo [de Nuestro poder para crear y resucitar] en la tierra muerta a la que hacemos revivir, y de la que hacemos salir el grano del que se alimentan;
(34) y [como] hemos puesto en ella palmerales y viñedos, y hacemos brotar manantiales en ella,
(35) para que coman de sus frutos, aunque no fueron sus manos las que los crearon. ¿No van, pues, a ser agradecidos?
(36) Infinito en Su gloria es Aquel que ha creado opuestos en todo lo que la tierra produce, y en los mismos hombres, y en lo que [aún] no conocen.
(37) Y tienen en la noche un signo [de Nuestro dominio sobre todo lo que existe]: la despojamos de [la luz de] el día –y ¡he ahí! que se quedan a oscuras.
(38) Y [tienen un signo en] el sol: circula en una órbita propia --[y] así ha sido dispuesto por voluntad del Todopoderoso, el Omnisciente;
(39) y [en] la luna, a la que hemos asignado fases [que debe atravesar] hasta que retorna como una vieja rama de palmera, seca y curvada:
(40) [y] ni el sol puede alcanzar a la luna, ni la noche usurpar el tiempo del día, pues cada uno navega en su órbita [conforme a Nuestras leyes].
(41) Y [debiera ser] un signo para ellos cómo transportamos a sus descendientes [sobre el mar] en naves cargadas,
(42) y [que] creamos para ellos otros similares en los que se embarcan [en sus viajes];
(43) y [que,] si queremos, podemos hacer que se ahoguen, sin que nadie responda a su llamada de auxilio: y [entonces] no podrán ser salvados,
(44) excepto por un acto de misericordia Nuestro y una concesión de vida por un [período adicional de] tiempo.
(45) Y [sin embargo,] cuando se les dice: “Guardaos [del conocimiento de Dios] de todo lo que es manifiesto para vosotros y de cuanto os está oculto, para que seáis agraciados con Su misericordia,” [la mayoría de los hombres eligen seguir sordos;]
(46) y no les llega un mensaje de los mensajes de su Sustentador al que no den la espalda.
(47) Así, cuando se les dice: “Gastad en los demás de lo que Dios os ha dado como sustento,” los que se empeñan en negar la verdad dicen a aquellos que creen: “¿Vamos a dar de comer a alguien a quien si [vuestro] Dios quisiera [Él mismo] daría de comer? ¡En verdad, estáis claramente extraviados!”
(48) Y añaden: “¿Cuándo se cumplirá esa promesa [de la resurrección? ¡Responded a esto] si sois veraces!”
(49) [Y no se dan cuenta de que] no les espera sino un único estampido [del castigo de Dios], que hará presa en ellos mientras siguen aún discutiendo [sobre la resurrección]:
(50) ¡y [tan repentino será su fin que] no podrán hacer testamento, ni regresarán con su gente!
(51) Y [entonces] se soplará la trompeta [de la resurrección] –y ¡he ahí, que se precipitarán desde sus tumbas hacia su Sustentador!
(52) Dirán: “¡Ay de nosotros! ¿Quién nos ha hecho salir de nuestro lecho?” [Entonces se les dirá:] “¡Esto es lo que el Más Misericordioso prometió! ¡Y Sus mensajeros dijeron la verdad!”
(53) No habrá sido sino un único estampido –y ¡he ahí! que se les hará comparecer ante Nosotros [y se les dirá]:
(54) “Hoy ningún ser humano será tratado injustamente en nada, ni seréis retribuidos sino por lo que hacíais [en la tierra].
(55) “En verdad, los que están destinados al paraíso serán hoy dichosos con lo que les ocupe:
(56) ellos y sus esposas, estarán felices, reclinados en divanes;
(57) [sólo] goces tendrán allí, y suyo será cuanto puedan desear:
(58) paz y plenitud por la palabra de un Sustentador que es dispensador de gracia.
(59) “¡Pero apartaos hoy, Oh vosotros que estabais hundidos en el pecado!
(60) ¿No os ordené, Oh hijos de Adán, que no adoraseis a Satán –ya que, en verdad, es un enemigo declarado vuestro --
(61) y que debíais adoradme [sólo] a Mí? ¡Ese habría sido un camino recto!
(62) Y [en cuanto a Satán --] él había extraviado ya a un gran número de vosotros: ¿no podíais haber hecho uso de la razón?
(63) “¡Este, pues, es el infierno del que se os advirtió una y otra vez:
(64) sufridlo hoy por vuestro empeño en negar la verdad!”
(65) Ese Día sellaremos sus bocas pero sus manos Nos hablarán, y sus pies darán testimonio de lo que se han ganado [en vida].
(66) Pues si hubiera sido voluntad Nuestra [que los hombres no pudieran discernir entre el bien y el mal], sin duda podíamos haberles privado de la vista, de forma que se extraviaran para siempre del camino [recto]: pues, ¿cómo podrían entonces haber percibido [la verdad]?
(67) Y si hubiera sido voluntad Nuestra [que no fueran libres de elegir entre el bien y el mal], sin duda podíamos haberles dado una naturaleza distinta, [como seres arraigados] en sus sitios, de forma que no pudieran avanzar, ni volverse atrás.
(68) Pero [deben tener presente siempre que] si prolongamos a alguien sus días, le restamos también facultades [al envejecer]: ¿no van, pues, a usar la razón?
(69) Y [así es:] no le hemos impartido a este [Profeta el don de la] poesía, ni habría sido acorde con este [mensaje]: no es más que un recordatorio y un discurso [divino], claro en sí mismo y que muestra claramente la verdad,
(70) a fin de advertir a quien está vivo [de corazón], y [para] que la palabra [de Dios] dé testimonio contra todos aquellos que niegan la verdad.
(71) ¿No ven, pues, que por ellos hemos creado, entre las cosas que han obrado Nuestras manos, los animales domésticos de los que [ahora] son dueños? –
(72) ¿y que los hemos sometido a la voluntad del hombre, de forma que algunos les sirven de montura y de otros se alimentan,
(73) y obtienen de ellos [muchos otros] beneficios, y [leche] para beber? ¿No van, pues, a ser agradecidos?
(74) Pero [no:] han dado en adorar deidades en vez de Dios, [esperando] ser auxiliados [por ellas, sin saber que]
(75) no pueden auxiliar a sus devotos, aunque para ellos [parezcan] ejércitos dispuestos [a auxiliarles].
(76) Sin embargo, no te aflijas por lo que digan [quienes niegan la verdad]: ciertamente, conocemos todo lo que guardan en secreto y también todo lo que hacen público.
(77) ¿No ve el hombre que le hemos creado de una [simple] gota de esperma –y luego, ¡he ahí! que se muestra dotado de capacidad para pensar y argumentar?
(78) ¡Y [ahora argumenta acerca de Nosotros, y] piensa de Nosotros en términos de comparación, olvidándose de cómo él mismo fue creado! [Y así] dice: “¿Quién dará vida a unos huesos convertidos en polvo?”
(79) Di: “Aquel que los creó por vez primera les dará vida [de nuevo], ya que Él conoce bien cada [aspecto de la] creación:
(80) Aquel que del árbol verde produce para vosotros fuego, pues, ¡he ahí! que encendéis [vuestros fuegos] con él.”
(81) ¿No es, acaso, Aquel que ha creado los cielos y la tierra capaz de crear [de nuevo] algo como esos [que han muerto]? ¡Claro que lo es! –pues sólo Él es el Creador Supremo, el Omnisciente:
(82) Su única orden, cuando decreta la existencia de algo, es decirle: “Sé” –y es.
(83) ¡Infinita es la gloria de Aquel en Cuya mano está el dominio absoluto sobre todas las cosas; y a Él seréis todos devueltos!